Peeling significa pelar y consiste en aplicar un ácido para provocar de forma controlada una lesión en la epidermis para eliminar las capas más superficiales mejorando la calidad, la textura y la apariencia de la piel.
Existen una gran variedad de peelings químicos médicos y será el profesional quien aconsejará un tipo u otro según las características y el tipo de problema que tenga el paciente.
Hoy os mostraremos un caso de Peeling Químico Médico en un tratamiento de melasma, que es un tipo de mancha que aparece de forma difusa en la cara generalmente en frente, mejilla y labio superior.
Lo que preocupa mucho a los pacientes es el pelado que provoca en la piel este tratamiento pero es evidente que si no exfoliamos será difícil resolver el problema.
En el momento de realizar el peeling el paciente nota una sensación de picor o ardor que desaparece a los pocos minutos.
En los días posteriores la piel está tirante hasta que empieza aproximadamente el segundo día la fase de pelado intenso y suele durar 2-3 días. Una vez finalizada esta fase de pelado el tono de la piel se unifica y el cutis está más liso y terso.